Prioriza programas en frío con detergente adecuado y activa el modo eco real, que alarga pero reduce el gasto total. Evita sobrecargar para no repetir ciclos. Limpia el filtro de la lavadora y nivélala para evitar vibraciones. Si mediste consumo por ciclo, comenta la diferencia entre 40 °C y frío, y qué tejidos se comportaron mejor.
Si usas secadora, limpia el filtro tras cada sesión y el conducto de salida periódicamente. Considera bolas de secado para mejorar el flujo de aire y agrupa prendas por grosor. En climas favorables, finaliza al aire para ahorrar los últimos minutos intensivos. Cuéntanos cuánto bajó el tiempo total con una simple limpieza profunda del conducto.
Ajusta pies niveladores, revisa mangueras por grietas, instala válvulas de cierre rápido y coloca bandeja anti-derrames. Un ventilador temporizado evita humedad acumulada, protegiendo electrónica cercana. Señaliza con etiquetas tu lista de tareas mensuales y anuales. Comparte una foto de tu checklist pegada en la puerta y qué recordatorio te salvó de una fuga.
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